El cambio de régimen 2

Y esto sí está atado y bien atado, pues desgraciadamente cuenta con el aval de JC, del desgobierno y de la presunta oposición.
Y cuándo comenzó el proceso de descomposición de la Nación, que nos ha traído el desastre actual?
Sencillamente al poco de morir el general Franco. 
Las leyes de reforma política del régimen eran necesarias e imprescindibles, lógicamente, pero no había por qué concentrar todo el poder en las autonosuyas, ni establecer un sistema electoral que prima a los partidos diminutos, pero con alto porcentaje de votos en áreas muy concretas y definidas, que una cosa es respetar a las minorías y otra muy distinta el vernos sometidos a su dictadura permanente, pues siempre son necesarios sus votos para alcanzar mayorías.
Con el transcurso de los años, ante la falta de mayorías absolutas de PSOE y PP, los partidos secesionistas han ido arrancando competencias y obteniendo parcelas de poder, hasta el extremo que un dirigente catalán afirmó que con el nuevo estatuto el estado era "residual" en aquellas tierras, enfrentando al gobierno central con el autonosúyico.
Ese enfrentamiento es lógico y coherente con la forma de pensar de los secesionistas, y el auténtico problema llega cuando el gobierno central hace suya esa forma de pensar, y consiente en ser tratado de igual a igual, cual si tratara con presidentes de repúblicas extranjeras, lo que se pudo visualizar claramente en la visita que hizo el lehendakari Ibarretxe a la Moncloa, donde ZP le recibió en pie de igualdad, lo que nunca debiera haber ocurrido, y así hoy en día es posible ver a cualquier politicucho de cualquier autonosuya amenazar al desgobierno con no acatar las leyes que son promulgadas y si cometen alguna fechoría jurídica dejan clara su intención de acatar sentencias que les sean desfavorables, pues la voluntad de los parlamentos autonosúyicos parece ser sagrada y no tener límites constitucionales ni de nigún tipo.
Estos graves actos en cualquier país civilizado tendrían graves repercusiones, y sus promotores tiempo ha que estarían fuera del juego político y entre rejas presumiblemente, por cometer manifiestas ilegalidades, pero en Expaña les sale gratis pues no se sabe por qué se considera que los políticos están muy por encima del bien y del mal, y sus actos nunca son censurables penalmente. Que la justicia en Expaña es así, se toma uno dos cervezas y coge el coche y arde en los infiernos, los políticos (sobre todo si son secesionistas) gozan de bula para burlar cuantas veces quieran el código penal, el civil y hasta el mercantil si se tercia y se les antoja, que los jueces son maleables, permeables  agradables y sumisos.
Y no digamos ya el Tribunal Constitucional, auténtico paraíso del mercadeo, del trapicheo y la compraventa, donde lo único que se discute es cómo redactar una sentencia que declare constitucional todo aquello que emane del desgobierno, por mucho que atente contra el sentido común y la constitución vigente (para los anales de la ignominia quedan la sentencia de RUMASA o la de la inmersión lingüística en catalán).
Con un presidente del desgobierno que odia todo lo que huela a España, con un jefe del estado complaciente siempre con los enemigos de España y con la izquierda (perdón por la redundancia) y una oposición alelada y muy posiblemente entregada a la causa, van dinamitando los cimientos de esta vieja de siglos nación, otrora admiración y espanto de las naciones del orbe, hoy espantajo y hazmerreír de cualquier dictadorzuelo caribeño.
(Continuará)